Una amplia área de baja presión ubicada en el Atlántico despertó el interés de los meteorólogos y expertos en huracanes por su potencial de convertirse en un fenómeno tropical antes de que finalice junio. Las condiciones actuales indican que esta perturbación podría alcanzar la categoría de depresión en cuestión de horas. La gran incógnita es si este evento se convertirá en la primera tormenta con nombre en esta temporada 2025, para lo cual deben cumplirse determinadas condiciones.
Durante la mañana de este lunes 23 de junio, el Centro Nacional de Huracanes (NHC, por sus siglas en inglés) emitió un informe que indica que la perturbación conocida como Invest 90L presenta un alto potencial de desarrollo ciclónico. Este sistema se encuentra a unos 965 kilómetros al este de las Bermudas y mostró una actividad convectiva desorganizada, aunque persistente.
Según el pronóstico oficial, las condiciones atmosféricas todavía resultan marginalmente favorables. Esto significa que, si las tormentas logran concentrarse más cerca del centro de la baja presión, podría formarse una depresión tropical en las próximas horas.
Sin embargo, esta ventana de desarrollo es breve. A partir del martes, el entorno comenzará a mostrar características menos favorables para la intensificación del sistema, lo cual podría limitar su duración y evolución.
En contraste, el Golfo de México permanece relativamente estable debido a la influencia de una cresta de alta presión que se impone sobre la región. Esta configuración generó vientos moderados del sureste en el sector occidental, mientras que en el este predominan brisas suaves a moderadas del este y sureste. En el centro y oeste del golfo, las olas oscilan entre uno y dos metros, con condiciones algo más agitadas en la bahía de Campeche.
A lo largo de la costa mexicana, entre Tampico y Veracruz, se registraron lluvias y tormentas eléctricas favorecidas por patrones divergentes en niveles altos de la atmósfera. Se espera que durante los próximos días, esta dinámica persista, con ráfagas de viento intensas por las tardes sobre el norte de Yucatán y la bahía de Campeche debido al paso de una vaguada térmica.
Con junio cerca de su fin, todas las miradas se concentran en el Invest 90L y su posible evolución en las próximas 24 a 36 horas. Si logra consolidarse como una depresión tropical y alcanza vientos sostenidos de al menos 63 km/h, el sistema recibiría un nombre oficial, por lo que se transformará en la primera tormenta con nombre del Atlántico en 2025.
Los pronosticadores del NHC advirtieron que esta posibilidad está acotada a un corto plazo, ya que las condiciones ambientales empezarán a deteriorarse a partir del martes, lo que dificultará una intensificación sostenida.
Por ahora, el sistema se mantiene en mar abierto y no representa una amenaza directa para áreas costeras, aunque es vigilado de cerca por los servicios meteorológicos regionales.
Si la evolución se concreta, el nombre que recibiría este evento sería “Andrea”, al seguir la lista oficial para la temporada atlántica de este año. Con una probabilidad del 70% de formación, según los últimos informes, la posibilidad de cerrar junio con una tormenta tropical activa en el Atlántico ya no es remota, sino cada vez más probable.