En una jornada de intensa movilización social y un contundente revés legislativo para el gobierno de Javier Milei, miles de personas en Corrientes salieron a las calles para defender la educación pública, en simultáneo con la sesión en la Cámara de Diputados de la Nación. Mientras la capital correntina era epicentro de un fuerte reclamo, el Congreso en Buenos Aires rechazó de manera abrumadora los vetos presidenciales a la declaración de emergencia en pediatría y al financiamiento universitario.
La movilización correntina contó con la participación de «toda la comunidad universitaria y con toda la sociedad», que se congregó para seguir de cerca la votación en Diputados. El rector de la Universidad Nacional del Nordeste (Unne), Omar Larroza, expresó su agradecimiento: «Estuvimos acá con toda la comunidad universitaria y con toda la sociedad que nos están acompañando. Estuvimos mirando la votación. Bueno, salió afirmativo, por lo tanto tenemos que esperar ahora en el tema del Senado». Añadió un «especial agradecimiento a todos los diputados que han hecho posible esta situación».
El significado de la Ley de Financiamiento Universitario
Según Larroza, la ley de financiamiento universitario, cuya insistencia fue aprobada en Diputados con 174 votos afirmativos, «prevé es recuperar todos los aspectos perdidos que hemos tenido con todo este periodo y a su vez generar un incremento en el gasto de funcionamiento que sea previsible». El rector enfatizó que, si bien «no es un presupuesto ideal, sí es un presupuesto por lo menos que intenta recuperar toda la masa salarial que se ha perdido durante todo estos tiempos» y garantiza las actividades sustantivas como «docencia, investigación y pensiones».
No obstante, el panorama para el presupuesto 2026 genera preocupación. Larroza advirtió que «claramente no hay una intención de poder mejorar, sino que simplemente lo que se propone en el presupuesto 2026 es distribuir lo que vamos a recibir en el 2025 sin los índices inflacionarios». A pesar de esto, señaló que «se abrieron algunas instancias de negociación donde van a adelantar el presupuesto gasto de funcionamiento» y que esas «instancias también están abiertas al diálogo». La amplia participación de «todas las generaciones, todos los actores sociales y y la sociedad en general» en el reclamo es lo que «mueve y moviliza el sistema universitario», generando un sentido de pertenencia.
Un grito nacional
La movilización en Corrientes se enmarcó en un «grito de una nación» que se replicó en todo el país, desde Córdoba hasta Rosario y Mendoza. El documento leído en la marcha destacó que «en todo el país, la Argentina vuelve a levantar su voz en defensa de las causas justas»: «Discapacidad, el Garraham y la salud pública, nuestros jubilados y jubiladas, las universidades públicas y el sistema científico». Este reclamo colectivo y multitudinario sintetiza «las cosas importantes que debemos cuidar y que definen a una nación».
El documento planteó que frente a la «falta de respuesta y de sensibilidad, la negación al diálogo, la difamación y los agravios y la profundización del ajuste y el desfinanciamiento. Salimos a la calle por tercera vez». El mensaje al gobierno del presidente Javier Milei es claro: «que cesen el hostigamiento».
A los legisladores, «representantes del pueblo de la nación en el Congreso», se les pidió «que por favor no abandonen ni dejen morir a la salud y a la universidad pública, ni a la ciencia nacional, que cuiden a nuestros mayores y a los más jóvenes». Se les instó a actuar con «memoria», recordando que «muchos de ustedes son graduados de la Universidad Pública Argentina». Finalmente, el documento solicitó que «cuando tomen la decisión hoy frente al veto, y en el debate presupuestario en adelante lo hagan como dignos hijos de nuestra educación y universidad, garantizando que las generaciones del presente y las que vengan tengan las mismas posibilidades que ustedes tuvieron».